


Post-expresionismo es un término acuñado por el crítico de arte alemán Franz Roh para describir una variedad de movimientos en el mundo del arte de la posguerra que fueron influenciados por el expresionismo, pero se definieron a sí mismos mediante el rechazo de su estética. Roh utilizó por primera vez el término en un ensayo en 1925, “Realismo Mágico: Post-Expresionismo”, para contrastar con la “Nueva Objetividad” de Gustav Friedrich Hartlaub, que caracterizó más estrechamente estos desarrollos dentro del arte alemán. Aunque Roh vio el “post-expresionismo” y el “realismo mágico” como sinónimos, los críticos posteriores caracterizaron las distinciones entre el realismo mágico y otros artistas identificados inicialmente por Hartlaub y también señalaron otros artistas en Europa que tenían diferentes tendencias estilísticas pero trabajaban dentro del mismo tendencia.

Teatro épico de entreguerras
Entre los dramaturgos alemanes que asistían inquietos al ascenso del nazismo, surge un teatro que reacciona contra el teatro antirracionalista de las vanguardias. Es un teatro de denuncia, usado para resolver los problemas políticos y sociales, por eso implica al espectador, lo enseña. Se le denominó Teatro épico o dialéctico y sus máximos representantes Erwin Piscator y Bertolt Brecht.
Piscator destacó en su obra Teatro político (1929) y por sus aportaciones a la escenografía. También introdujo como novedad actores con convicciones políticas que ayudaran al éxito de este teatro.


Bertold Brecht
Su oposición al nazismo y su vinculación con el marxismo lo llevó al exilio desde 1933 hasta 1948, año en que formó el Berline Ensamble. En su teatro intenta evitar que el público tenga una respuesta emocional y lo fuerza a contemplar la obra desde una perspectiva racional, para asegurar el valor didáctico de la misma, a través de técnicas como: la tercera persona, la utilización de un narrador, los apartes, la interrupción de la acción, la importancia del gesto o las máscaras. Mezcla el lenguaje coloquial con formas poéticas, la prosa y el verso en formas libres. Los temas son: el poder, la guerra o la justicia. Destacan grandes obras como Galileo Galilei (1939), El círculo de tiza (1944) y Madre Coraje y sus hijos (1941). En esta última el autor reflexiona sobre la guerra a través del personaje de una mujer, Madre Coraje, para la que la guerra es el estado natural, el que le permite ganar su sustento, pero no se da cuenta de que la contienda le arrebata mucho más de lo que gana.
Erwin Piscator
Destacó en su obra Teatro político (1929) y por sus aportaciones a la escenografía. También introdujo como novedad actores con convicciones políticas que ayudaran al éxito de este teatro.
Principal dramaturgo y teórico del que es conocido como Teatro político, el cual se enfocaba en el contenido sociopolítico del drama y no en la inmersión emocional del público o en la belleza formal de la producción. El suyo es un teatro de marcado carácter marxista, por su concepción teórica y por los fines que busca, la creación de un teatro de y para el proletariado que propiciara la transformación de la sociedad.
